Si tuviera que darle valores a las palabras clasificándolas en
valor emocional, valor moral y valor social, lejos la que mayor comprometimiento
tiene en todos esos sentidos es la
palabra FIDELIDAD.
Buscando definiciones descubrí que existen MILES! Desde frases al estilo Paulo Coelho (anga) y
otra lista de pensadores y filósofo de todos los tiempos, seres quienes se
merecen todo mi respeto, puedo deducir que esa misma carga de valores que
siento fue analizada ya por gente muy grossa anteriormente.
Y nadando en ese mar de definiciones debo reconocer que una
de ellas me llamo la atención poderosamente. La misma rezaba: FIDELIDAD es una noción que en su nivel más
abstracto implica una conexión verdadera con una fuente. Su significado
original está vinculado a la lealtad
Esta definición me atrapo como luz a un bichito porque en
ella están unidas dos palabras que para mí no tienen nada que ver! Fidelidad y
lealtad. La fidelidad no tiene nada que ver con la lealtad y paso a explicar
esto.
Ser fiel y ojo, hablo
de la vida misma, no solo de la fidelidad a nivel pareja. Ser fiel es estar
liado a algo, a un sentimiento o a una doctrina, ser fiel es transitar un
camino con la convicción de que ese camino es el correcto. Ser fiel es aceptar
que en pro de seguir con nuestras convicciones estamos renunciando a todo lo
que tácitamente no está implícito en el hecho o a todo lo que nos alejan del
objetivo en cuestión.
Pero somos seres imperfectos y contradictorios, eso sin
contar con las “pruebas” a las cuales la vida misma nos enfrenta. Momentos en
donde nuestra propia naturaleza destructiva o aventurera nos aleja del objetivo
y debemos optar por avanzar o retroceder.
Entonces ser infiel es una posibilidad que esta tan latente
siempre! Somos infieles a nuestras convicciones, infieles a nuestras creencias,
a nuestros sentimientos y hasta a nuestra manera de vivir. Ser infiel es
aventurarnos a eso que la vida o nuestra naturaleza nos enfrenta. Caer,
destruir lo que construimos, experimentar con la gran posibilidad de perder o
de herirnos. Somos infieles en muchos aspectos, somos infieles y lidiamos con
eso siempre. Entonces mi pregunta es tomando como ejemplo la definición inicial.
Y la lealtad?
La lealtad es otra cosa! Ser leal no da otra opción a nada
más, ya que no podemos ser desleales a nosotros mismos. Aunque pequemos de infieles
seguimos siendo leales a nosotros mismos
siempre, hasta cuando somos infieles a nuestra manera de concebir nuestro
destino.
Se puede ser infiel pero no desleal. Porque en nuestra infidelidad somos leales a
nuestra naturaleza.